lunes, 10 de mayo de 2010

Hay cosas que tengo que decirte:
Te pido perdón por las cosas que no te di, no te haré sonreír. Sólo quería envejecer a tu lado para que pudiéramos reírnos viendo cómo se nos arrugaba el cuerpo, juntos hasta el final, en el lago de nuestro cuadro -ése era nuestro cielo, ¿sabes?-; se echan de menos muchas cosas, libros, siestas, besos, ¡Discusiones, Dios! Las hemos tenido buenas...